Primera infancia
La primera infancia, comprende desde el nacimiento hasta los seis años, es una etapa de crecimiento y descubrimiento extraordinarios. Durante este período, se sientan las bases para el desarrollo cognitivo, emocional, social y físico.
“Revisado médicamente por el equipo médico de Centro Sequoia, México - actualizado el 29 de agosto del 2023." (Tiempo de lectura aproximado: 16 minutos)
¿Por qué es crucial la primera infancia en el desarrollo humano?
La primera infancia, que comprende desde el nacimiento hasta los seis años, es una etapa de crecimiento y descubrimiento extraordinarios. Durante este período, se sientan las bases para el desarrollo cognitivo, emocional, social y físico.
Características en desarrollo de la primera infancia
La primera infancia es un periodo de rápido desarrollo y cambio que se extiende desde el nacimiento hasta aproximadamente los seis años de edad. Durante esta etapa, se observan avances significativos en diversas áreas. A continuación, se describen algunas de las características principales de la primera infancia:
1. Desarrollo cognitivo
- Aprendizaje acelerado: Durante estos primeros años, los niños aprenden a un ritmo más rápido que en cualquier otro momento de sus vidas.
- Desarrollo del lenguaje: Se pasa de balbuceos a palabras individuales, luego a frases y, finalmente, a conversaciones más complejas.
- Curiosidad innata: Los niños comienzan a explorar y a intentar comprender el mundo que los rodea.
2. Desarrollo físico
- Crecimiento rápido: Aumento notable en altura y peso, especialmente durante los primeros 12 meses.
- Desarrollo motor grueso: Evolución desde los movimientos reflejos del recién nacido hasta caminar, correr y saltar.
- Desarrollo motor fino: Capacidades que se refinan, como agarrar objetos, sostener un lápiz y manipular pequeños juguetes.
3. Desarrollo socioemocional
- Apego: Se establece un fuerte vínculo con los cuidadores principales, que suele ser esencial para el bienestar emocional del niño.
- Reconocimiento de sí mismo: Comienzan a reconocerse en un espejo y a desarrollar un sentido del "yo".
- Juego simbólico: Los juegos de simulación se vuelven comunes, y los niños comienzan a asumir diferentes roles, como el de madre, padre, doctor, entre otros.
4. Desarrollo moral y ético
- Comprensión básica de lo "correcto" y lo "incorrecto": Aunque esta comprensión es inicialmente basada en las reglas y direcciones de los cuidadores, gradualmente comienza a internalizarse.
5. Desarrollo de la personalidad y temperamento
- Emergencia de rasgos distintivos: Algunos niños pueden ser naturalmente tímidos, mientras que otros pueden ser más extrovertidos o persistentes.
6. Desarrollo sensorial
- Percepción aumentada: Mejora en la capacidad para usar la vista, el oído, el tacto, el gusto y el olfato para descubrir y procesar información sobre el mundo.

Estas características, aunque generalizadas, pueden variar de un niño a otro. Es importante tener en cuenta que cada niño es único y que el ritmo y la naturaleza de su desarrollo pueden diferir según factores individuales, culturales y ambientales.
Cuáles son las etapas o periodos de la primera infancia
La primera infancia se suele dividir en varias subetapas o períodos que reflejan los diversos desarrollos y desafíos que enfrentan los niños a medida que crecen.

Estas subetapas son generalmente reconocidas por profesionales de la salud y educadores, y, aunque pueden variar ligeramente en función de las fuentes, a menudo se describen de la siguiente manera:
- Periodo neonatal (0-1 mes):
• Se refiere a las primeras cuatro semanas de vida.
• Durante este tiempo, el bebé se adapta a la vida fuera del útero.
• Los reflejos básicos, como el reflejo de succión y el reflejo de agarre, son predominantes. - Infancia temprana (1 mes - 1 año):
• Los bebés experimentan un rápido crecimiento físico.
• Aparecen las primeras sonrisas intencionadas, el reconocimiento de rostros familiares y el inicio de las vocalizaciones.
• Los hitos motrices incluyen voltearse, sentarse, gatear y, en algunos casos, dar los primeros pasos. - Infancia tardía o posterior (1-3 años):
• También conocido como etapa de los "terribles dos".
• Durante este período, los niños comienzan a caminar de manera segura, correr, saltar y escalar.
• El lenguaje se desarrolla rápidamente, pasando de palabras sueltas a frases y oraciones simples.
• Existe un fuerte deseo de independencia y autodefinición. - Edad preescolar (3-5 o 6 años):
• Los niños se vuelven más sociales y comienzan a interactuar más con sus compañeros.
• La imaginación y el juego simbólico florecen.
• Se desarrolla la capacidad para pensar de forma más lógica y resolver problemas simples.
• Se observa un crecimiento en habilidades motoras finas, como recortar con tijeras o dibujar figuras básicas.
• Se preparan para el inicio de la educación formal en la escuela.
Es crucial entender que, aunque estos rangos de edad proporcionan una guía general, el desarrollo de cada niño es único. Las diferencias individuales, influencias culturales, experiencias tempranas y factores genéticos pueden hacer que algunos niños alcancen hitos de desarrollo antes o después que otros.
Por lo tanto, es esencial abordar el desarrollo de cada niño como individual y único, ofreciendo apoyo y oportunidades adecuadas en cada etapa.
Estatura durante la primera infancia
1 año
Durante el primer año el niño crece cerca de 25 centímetros. Posteriormente, el aumento de talla al mes será de aproximadamente dos centímetros, aumentando con mayor rapidez en los primeros meses y desacelerando con la cercanía del primer año.
2 años
Durante este año el crecimiento se verá reducido casi a la mitad. Su crecimiento será de aproximadamente 12.5 centímetros. El niño debería de estar creciendo al mes cerca de un centímetro, aunque esto no es una regla a cumplir.
Se estima que en esta edad el infante podría estar cerca de los 87 centímetros de altura, esto se estima de acuerdo al tamaño que tuvo el bebé al nacer, así como su historial clínico, genética y la talla final de los padres.
2 años en adelante
A partir de los dos años en adelante, los niños que están en esta etapa crecerán a un ritmo constante, pero a una menor velocidad. Posteriormente su crecimiento se puede ver reflejado de la siguiente forma:
- 2 años: aumenta una medida de 8 centímetros.
- 3 - 4 años: aumenta una medida de 7 centímetros.
- 4-5 años: aumenta una medida de 6 centímetros.
- 6 años: aumenta una medida de 4 centímetros.

Recuerde que el especialista en la atención de la primera infancia y su desarrollo y crecimiento es el endocrinólogo pediatra. Y si tu hijo tiene problemas con su crecimiento en Sequoia contamos con especialistas que diagnosticarán las causas por las que tu hijo no crece adecuadamente y lo ayudarán a alcanzar una mayor estatura.
Factores importantes del crecimiento y la primera infancia
La relación entre la primera infancia y la estatura es una combinación de genética y factores ambientales, en particular, nutrición y salud general. Durante la primera infancia, que abarca desde el nacimiento hasta aproximadamente los seis años de edad, los niños experimentan un crecimiento físico acelerado.
La estatura, o altura, es un indicador crucial de este crecimiento y puede ser influenciada significativamente por las experiencias y condiciones durante esta etapa. A continuación, se describen algunas de las conexiones clave entre la primera infancia y la estatura:
- Nutrición:
• Importancia de la lactancia materna: Se ha demostrado que la lactancia materna proporciona los nutrientes esenciales para el crecimiento y desarrollo óptimo de los niños, lo que puede influir en la estatura final del individuo.
• Desnutrición: La desnutrición durante la primera infancia, especialmente durante los primeros 1000 días (desde la concepción hasta el segundo año de vida), puede resultar en retraso en el crecimiento, lo que se refleja en una estatura baja para la edad.
• Micronutrientes: La deficiencia de ciertos micronutrientes como hierro, zinc, y vitaminas puede impactar el crecimiento lineal y, por ende, la estatura. - Salud general:
• Enfermedades: Las enfermedades recurrentes o crónicas durante la primera infancia, especialmente aquellas relacionadas con infecciones gastrointestinales, pueden impedir la absorción adecuada de nutrientes y, por lo tanto, afectar el crecimiento.
• Vacunación: Mantener un programa de vacunación completo puede prevenir enfermedades que interrumpen el crecimiento normal. - Genética:
• Aunque los factores ambientales juegan un papel crucial en la determinación de la estatura durante la primera infancia, la genética también es esencial. Los genes heredados de los padres influirán en la altura potencial de un individuo. - Factores socioeconómicos y ambientales:
• Las condiciones de vida, como el acceso a alimentos nutritivos, agua potable limpia, y un ambiente seguro y estimulante, pueden influir en la estatura. Las familias en situaciones socioeconómicas desfavorecidas pueden enfrentar más desafíos en proporcionar estas condiciones óptimas. - Hormonas:
• Las condiciones que afectan la producción normal de hormonas de crecimiento durante los primeros años pueden influir en la estatura. Las interrupciones o anormalidades en la función de estas hormonas requieren atención médica especializada.
En resumen, mientras que la genética establece un rango potencial para la estatura de un individuo, las condiciones y experiencias durante la primera infancia tienen un impacto significativo en dónde se ubicará un individuo dentro de ese rango. La atención adecuada, la nutrición y la salud durante estos años críticos son esenciales para alcanzar el potencial de crecimiento completo.
Cómo apoyar el desarrollo en la primera infancia
Cuidado responsivo
- Responder de forma adecuada y oportuna a las necesidades del niño.
Juego dirigido y libre
- Proporcionar juguetes educativos y tiempo para el juego espontáneo.
Entorno seguro y saludable
- Evitar riesgos físicos.
- Proporcionar una dieta balanceada.
- Establecer rutinas consistentes.
Conclusiones y recomendaciones del autor
La primera infancia es un período crucial en la vida de cualquier individuo. Garantizar una base sólida durante estos años iniciales puede traducirse en un adulto saludable, feliz y productivo. Como sociedad, es esencial que valoremos y apoyemos activamente a los más jóvenes durante esta etapa fundamental.